Un cuadro o una obra de arte magnífica decoran tu hogar, pero por alguna razón en particular lo mudarás a otro sitio, ¿por dónde empezar? Retirarlo no es tan simple como parece. Son objetos muy costosos, atractivos y delicados, su movilización es extremadamente cuidadosa y los materiales para protegerlos tienen que ser exclusivos, de alta calidad. Ni hablar de las condiciones que deben tener el camión o la furgoneta para hacer mudanzas de lujo.

Muchas familias conservan colecciones, lámparas, espejos u otras piezas únicas que son imposibles de trasladar de manera particular; para nada funcionaría llamar a un par de amigos que ayuden a guardar estas pertenencias en cualquier caja y meterla en el asiento del coche. Son objetos elaborados con componentes muy finos y limitados, por lo que una caída o un tropiezo serían cruciales.